martes, 20 de septiembre de 2016

Ha nacido una nueva competencia...

Me estreno en este blog, con el que deseo y espero cumplir como se debe, con una entrada sobre una nueva competencia...¡Vaya! erámos pocos y ...¿otra más? No desesperemos...
Se trata de la competencia que nos prepara para un nuevo mundo, quizá más deseable e inclusivo: la competencia global, para la que la OCDE prepara el marco teórico para su evaluación. El marco representa un enfoque nuevo, ambicioso y todavía experimental para el estudio PISA 2018. Así que, creo que merece la pena conocer a grandes rasgos, cómo se define y conforma, y de paso, si algo útil puede ser trasladado a nuestras aulas.

¿Qué es la Competencia Global?

La competencia global se define como la capacidad para analizar críticamente y desde múltiples perspectivas aspectos globales e interculturales, para comprender cómo las diferencias afectan a las percepciones, juicios e ideas de sí mismo y de los otros, y para implicarse en interacciones abiertas, apropiadas y efectivas con personas de diferentes entornos, sobre la base de un respeto compartido por la dignidad humana.


Y como toda competencia, se conforma como una capacidad para movilizar conocimientos, destrezas, actitudes y valores, junto a un enfoque reflexivo sobre el proceso de aprendizaje, para implicarse y actuar en el mundo.

Dimensiones de la competencia

En la siguiente infografía, traducida del mismo documento referenciado al final del documento, se pueden apreciar las dimensiones de la competencia global que serán evaluadas:

Definición de la estrategia de evaluación

Aunque la competencia global tienen claramente muchos componentes, el primer foco de la evaluación en PISA va a estar centrado en los componentes cognitivos: a) conocimiento y comprensión de temas globales y b) conocimiento y comprensión de conocimiento intercultural, definidos en la publicación de referencia, así como en destrezas analíticas y críticas que pueden ser valoradas en las escalas cognitivas.
El formato que se prevé van a tomar los estímulos es el de una presentación de un caso con medios para ilustrar la historia (textos, tiras de cómic, fotografías...) evitando una excesiva carga lectora. Los ítems, además de los clásicos de elección múltiple en este tipo de pruebas, se aconseja que sean de respuesta abierta, puntuándose con guías de valoración. Por otra parte, los componentes actitudinales y alguna que otra destreza (skill) serán recogidos mediante cuestionarios con escalas tipo Likert.
Tanto las guías de valoración para ítems de respuesta construida (respuesta abierta), como una consideración sobre las escalas tipo-Likert, serán tópicos a tratar sin duda alguna en este blog.

El documento se centra también en la definición de cultura y competencia intercultural, como aspecto subsidiario de la competencia global. Un enfoque interesante sobre el que se construye la noción de pensamiento intercultural como el centro de la evaluación y la definición de sus niveles de desempeño, ya propuestos en su día por Hanvey (1975), como posibilidad para escalar el conjunto de destrezas y conocimientos anteriormente citados.

Desde luego, este enfoque de estudio de la OCDE no es del todo novedoso, se ponen ejemplos de otras evaluaciones internacionales sobre estos aspectos ya realizadas como CIVED (1999) o ICCS (2009, 2016) de la IEA o la Global Understanding Survey (1981).

¿Se puede enseñar la competencia global?

Por supuesto, ya se está haciendo, explícitamente a través de  asignaturas en Ed. Secundaria como Valores éticos, y en su día con Educación para la Ciudadanía, donde se incluyen algunos de los componentes de la competencia en sus bloques de contenido. E implícitamente con propuestas metodológicas activas desde otras áreas o materias en toda la enseñanza formal. Todo ello en aras a desarrollar la competencia clave: competencias sociales y cívicas. Ejemplos de ello son: el aprendizaje-servicio, estudio de casos, aprendizaje cooperativo con su abanico de técnicas o técnicas aisladas como los incidentes críticos... Es decir, adoptando un enfoque en el que los contenidos interculturales y globales impregnan el currículo de otras áreas, estrategia que recomienda la propia OCDE. Se trataría, por tanto, de integrar en el currículo la perspectiva global, internacional e intercultural, de aflorar las culturas no dominantes. Ejemplos citados son el currículo Australiano o el Coreano.


Portada de la publicación

Todo lo aquí referenciado y más se puede ampliar en la publicación original Global Competency for an inclusive World.

Otras lecturas de interés





3 comentarios:

Sergio Mestre dijo...

Enhorabuena por la initiativa. Espero q disfrutes de este nuevo proyecto

El rincón de Fani dijo...

Seguiré con mucho interés el blog Javier seguro que es muy interesante...

Unknown dijo...

Estupenda iniciativa, Javier. Seguro que podrás aportar muchas ideas y recursos en este mundo complejo y fascinante de la evaluación.