martes, 7 de mayo de 2019

Cuestionarios cognitivos (III): Estímulos

En esta tercera parte vamos a abordar el asunto de los estímulos en cuestionarios cognitivos. Ya se ha indicado en anteriores entradas referidas a este instrumento de evaluación que su aparición ha sido más frecuente en cuestionarios sobre evaluación de competencias clave en las evaluaciones de diagnóstico (LOE) y las individualizadas (LOMCE), todas ellas de carácter externo.

Sin embargo, el uso de este tipo de elementos en los cuestionarios de clase no es tan habitual. Generalmente, en los cuestionarios que se usan en clase, cada pregunta presenta en su enunciado la información necesaria para responder, e independiente del resto de preguntas. Esta información, a menudo, está desprovista de un contexto de aplicación de los conocimientos demandados.



Fuente: Extracto de preguntas de una prueba de Matemáticas 6º Ed. Primaria (ANAYA)

Entonces...

¿Qué hace que un cuestionario de este tipo evalúe una competencia?

O bien que el dominio de evaluación sea una competencia o, en el caso de no serlo, que se refiera a una asignatura, presentando los conocimientos a evaluar en un contexto de aplicación.
Recordemos que una competencia se define por el conjunto de conocimientos, destrezas y actitudes que se aplican de manera efectiva en un contexto determinado.

Estos contextos pueden ser: personales, académicos / laborales, sociales; personales, locales, nacionales, globales... Y se concretan en situaciones (problema) mediante los llamados estímulos. Dicho de otra manera, un estímulo es una pieza de información referida a un contexto o situación, utilizada en los cuestionarios cognitivos para evaluar unos conocimientos.

Los reactivos (ítems / preguntas) se ponen en relación con este estímulo (que representa un contexto) para movilizar conocimientos (factuales, conceptuales, procedimentales y metacognitivos) y en menor medida destrezas, de manera eficiente.

Materiales para generar estímulos

La verdad es que toda información que nos rodee que sirva para evidenciar un tipo de conocimiento en nuestro alumnado mediante la respuesta a preguntas que hagamos sobre esa información, es susceptible de convertirse en estímulo. Aquí va una lista:
  • Noticias, artículos – en papel o en Internet.
  • Compras, incluyendo anuncios.
  • Objetos reales y su embalaje – comida, bebidas, ingredientes, materiales, jardín, hogar, medicinas, productos de limpieza, etc.
  • Cocina y comida – recetas.
  • Panfletos y octavillas
  • Mapas y guías.
  • Información financiera.
  • Información sobre edificios, jardines, campos de deporte, parques, etc.
  • Información sobre vacaciones y viajes.
  • Materiales de trabajo, si se ve apropiado.
  • Una foto con texto al pie.
  • ...
Muchos de estos estímulos tendrán que modificarse para hacerlos asequibles a nuestro alumnado. Por ejemplo, si cogemos una factura de la luz tal cual es en el mundo real, quizá haya que escanearla y editarla: eliminado toda información que excede a las competencias a evaluar, quitando la publicidad y datos personales, agrandando alguna tipografía o destacándola, etc.

En la evaluación de la competencia lectora (o comprensión lectora) el estímulo es un texto, que se refiere a un contexto determinado y que puede clasificarse según su fuente, organización, formato o tipología textual. Sobre ellos y las estrategias para generar preguntas a partir de ellos se hará una entrada especial.

Criterios básicos para seleccionar un buen estímulo

  • Que sea rico en los matices que proporciona la información que contiene, e interesante. Evitar temáticas que no generen demasiado interés y que puedan llegar a aburrir.
  • Que presente un reto óptimo a los estudiantes, ni demasiado difícil ni demasiado fácil para el nivel al que va dirigido. No ha de plantear retos artificiales o añadidos, que lo harían más difícil de comprender. Se debe cuidar especialmente la cantidad de información que contiene, sobre todo en niveles educativos inferiores, que puede sobrecargar la tarea cognitiva más importante: contestar a las preguntas planteadas sobre él.
  • Que ofrezca la oportunidad de realizar preguntas sobre el conocimiento a evaluar. 
  • Que sea accesible y equitativo atendiendo a posibles diferencias en los alumnos. Por supuesto, no se ha de utilizar algo que sea potencialmente ofensivo o que pueda molestar o discriminar.
Una advertencia final, antes de exponer algún ejemplo de estímulos. No evaluar conocimientos con este tipo de estrategia si antes en las actividades de clase el enfoque no es este. Recordad que lo importante en evaluación no es ser más o menos "moderno", "guay", si no más bien ser coherente con la metodología de enseñanza y el currículo de referencia (véase esta entrada: El papel de la evaluación en la taxonomía de Bloom (II)).

Ejemplos


PISA - Competencia Matemática
(OCDE)


PISA - Competencia Científica (estímulo digital interactivo)
(OCDE)

Evaluación de Diagnóstico 2011-12 - Conciencia y Expresión Cultural 4º Ed. Primaria
(Junta de Andalucía)

Evaluación de Diagnóstico 2010 - Competencias Sociales y Cívicas 
(Gobierno del País Vasco)